jueves, 12 de junio de 2014

¿Qué necesito?

Del blog de Eloy Moreno
Un maestro zen, famoso por llevar una vida austera, se desplazó junto a un grupo de monjes a una gran ciudad para participar en una conferencia. Una vez allí habló sobre su propia experiencia: contó que vivía en una pequeña casa con apenas tres o cuatro muebles; que no tenía excesiva ropa ni comodidades; que, en realidad, tenía la riqueza a su alcance gracias a lo que le daba la naturaleza.
A la vuelta -ya en el aeropuerto-, como tenían dos horas libres, los monjes decidieron entrar en un centro comercial, pues la mayoría de ellos nunca había estado en ninguno. Cuando ya llevaban un rato allí dentro, los monjes se dieron cuenta de que el maestro comenzaba a observar detenidamente la mayoría de los productos que se vendían: los tocaba, se interesaba por ellos, incluso se acercaba a algún dependiente para preguntar.
Asombrados, fueron poco a poco saliendo todos, a excepción del maestro que continuaba yendo de pasillo en pasillo. Finalmente, justo unos minutos antes de coger el vuelo, salió en silencio. Ninguno de sus discípulos entendía como él, un hombre tan austero, había estado tanto tiempo en aquel lugar. Aún así nadie dijo nada.
Ya en el avión, su compañero de asiento se atrevió a preguntarle.
-Maestro -le dijo en voz baja-, como es que usted, que tanto ha profesado el desapego a lo material y la vida austera, ha sido justamente el último en salir del centro comercial.
-Es que me he quedado maravillado de todas las cosas que existen y no necesito.
Este cuento está basado en un hecho similar que le ocurrió a Socrates.

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