lunes, 31 de diciembre de 2018

QUÉDATE AQUÍ

Ya que no quieres venir conmigo, te ruego que no me acompañes. ¡Quédate aquí! Quédate a orillas de este año, que mañana se llamará de otra forma. No te vengas enredado en mi memoria. No te dibujes en mi imaginación, ni en mi recuerdo. No me sigas callado, con tus ojos tristes, en los días nuevos. 

Ya que no quieres verme, no vengas tras de mí, subrayando este invierno. Porque ya me quema tu frío y quiero creer en la primavera que espera paciente en las ramas desnudas de los árboles. 

¡Quédate aquí y no me sigas, si nada quieres conmigo! 
Quiero irme con todo el amor que no has querido. Tú, que has elegido ser piedra, ser hielo y ventisca, quédate en el año que concluye y no ensanches mi soledad con tu presencia hueca.

Tal vez, como el magma que vive en el centro de un volcán nevado, también albergues un corazón que arde. Tal vez te habite la ternura que intuí en ti. Tal vez, todo lo que hizo que yo te quisiera, sea verdad. Pero nada dejas al alcance de mis manos. Y ya no quiero mendigar más a los pies de estos muros que has alzado. Así que te lo ruego: Escucha mis palabras como si de una plegaria se tratara. Ya que me dejas sola, deja que sola, me vaya...

Quédate aquí, a este lado de la puerta que esta noche cerraré.
                                                                  
                                                                        Belén Cano Padilla


miércoles, 26 de diciembre de 2018

VIVIR, ES SENTIR TODO...

Pareciera que en estas fechas tod@s debiéramos estar felices y content@s pero si somos sincer@s (por lo menos con nosotr@s mism@s) ... No siempre es así.

"No te deseo un año maravilloso donde todo sea bueno. Ése es un pensamiento mágico, utópico.
Te deseo que te animes a mirarte, y que te ames como eres.
Que tengas el suficiente amor propio para pelear muchas batallas, y la humildad para saber que hay batallas imposibles de ganar por las que no vale la pena luchar.
Te deseo que puedas aceptar que hay realidades que son inmodificables, y que hay otras, que si corres del lugar de la queja, podrás cambiar.
Que no te permitas los "no puedo" y que reconozcas los "no quiero".
Te deseo que escuches tu verdad, y que la digas, con plena conciencia de que es sólo tu verdad, no la del otro.
Que te expongas a lo que temes, porque es la única manera de vencer el miedo.
Que aprendas a tolerar las "manchas negras" del otro, porque también tienes las tuyas, y eso anula la posibilidad de reclamo.
Que no te condenes por equivocarte; no eres todopoderoso.
Que crezcas, hasta donde y cuando quieras.
No te deseo que el 2019 te traiga felicidad.

Te deseo que logres ser feliz, sea cual sea la realidad que te toque vivir"
Mirta Medici (psicóloga)

domingo, 16 de diciembre de 2018

sábado, 15 de diciembre de 2018

EL TIEMPO QUE ME QUEDA JUNTO A TI.

COMPARTO ESTE PRECIOSO POEMA DE MI AMIGA DEL ALMA. TODA ELLA ES POESÍA Y ESCRIBE ESTAS CARICIAS QUE NOS HACEN REFLEXIONAR, CRECER Y DISFRUTAR DE LAS PALABRAS.


El tiempo que me queda junto a ti,
son lianas azuladas mis venas
posadas en la blancura de tus manos,
que llevan el baile de nuestros pasos.
Mi espalda encorvada, rama de un árbol,

mi piel, desafinado acordeón.
Mi alma, esqueleto de huesos quebrados.

El tiempo que me queda junto a ti,
caminas a mi son, muy despacio,
como si me fuera a romper.
Torpes estos pasos desobedientes,
esta desacostumbrada lentitud,
no soy viento que te lleva libre
ni brazos que te acunan como ayer.

El tiempo que me queda junto a ti, 
solo soy lo que queda de mí,
pudor en las pupilas cuando me miras,
entregado a tus manos avergonzadas
sobre mi carne desnuda,
pajarillo asustado y replegado
en un cuerpo convertido en campo de batalla.

El tiempo que me queda junto a ti,
no harán falta las palabras vanas,
que me hablan como a un niño,
bendeciremos los silencios
que me dejarán ser hombre,
cerraré esta boca añeja de saliva agria,
esta lengua ajada de aliento viejo,
indultada con tus besos,
frescos labios sobre mi piel
de geografía seca y surcada.

Olga Mª Palmero Gamboa